martes, 11 de marzo de 2008
El talento esta en la calle
Paseando por la calle se ven y oyen auténticas genialidades, y ya sé que sobre este tema se podrían escribir enciclopedias, pero me apetece contar alguna maravilla suelta.
Primera historieta. Estoy en un autobús urbano de La Coruña, más o menos lleno. Entra una señora de avanzada edad cargada con bolsas de la compra. El bus arranca y la señora avanza tambaleándose hasta la mitad del autobús, donde se para agarrándose como puede a una barra. Justo delante de ella hay una pandilla de unos 10 quinceañeros sentados en los asientos. Entonces ella, viendo que ninguno le ofrece un sitio, le dice bien alto a otro señor que también va de pie: “Desde luego, ya no quedan caballeros”. Entonces uno de los chavales suelta: “Señora, lo que no quedan son sitios”. Sí, todo lo cabrones y maleducados que queramos, pero tuvo gracia.
Otra: Un coche lleno de mierda, de los que si lo encuentra una panda de críos le llenan los cristales de “Cerdo”, “lávalo guarro” y demás cosas parecidas. Bueno, hay un par de fotos por internet de un coche al que le escribieron en la luneta trasera: “Ojalá mi novia fuera tan guarra como tú”. Genial.
Uno más: Dique de abrigo de Espasante (pueblecito costero de las Rías Altas coruñesas). El dique puede tener... ¿unos doscientos y pico metros de largo por unos 10 de alto? Más o menos ¿no? Bueno, pues hace unos años había una pintada que ponía en enormes letras blancas de varios metros de altura algo así como: “No, no teníamos nada mejor que hacer”. ¡Y ocupaba casi toda la extensión del dique! Brutal.
Y por último, comparto el contenido de una pintada en una pared de un barrio de Madrid: “Las feas también tienen derecho a vivir, ¡pero no todas en este barrio!” Si el que ha escrito eso no es un superdotado de las tapias, que venga Dios y lo vea.
Al menos para mí, es una enorme cura de humildad comprobar la existencia de tanto genio anónimo por ahí suelto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario