viernes, 16 de diciembre de 2011

La Roja: Menos lobos, Caperucita


Yo, desde el orgullo más absoluto de un Campeón del Mundo de Fútbol en plena vigencia de su título, estoy más que harto del jaboneo constante a la Selección Española.

Y una cosa no quita la otra, porque puedo estar encantado con mi título, pero también querer ganar la próxima Eurocopa, y hasta el próximo Mundial. Y creernos estupideces como que somos “la selección que mejor juega del mundo”, “no hay ningún rival a nuestra altura” y burradas parecidas son el mejor camino para cagarla estrepitosamente.

Así que vamos a repasar los números, que siempre son clarificadores. Y vamos a comparar nuestro increíble mundial que asombró al mundo con los 4 mundiales de... pongamos que Italia, “esa selección tan rácana, que juega horriblemente mal y que gana sólo de suerte” (en palabras de tanto iluminado tikitakero).

Italia ha ganado 4 mundiales, y con esta diferencia de goles (datos de Wikipedia):
Mundial de Italia 1934: Italia campeona con +9 goles.
Mundial de Francia 1938: Italia campeona con +6 goles.
Mundial de España 1982: Italia campeona con +6 goles.
Mundial de Alemania 2006: Italia campeona con +10 goles.

Y ahora, veamos el único título de la España del tiki-taka:
Mundial de Sudáfrica 2010: España campeona con + 6 goles.

O sea que la mejor España de la historia “que asombra al mundo del fútbol”, es equivalente a la más “rácana” Italia que haya ganado mundial alguno jamás, e inferior a la última Italia campeona, la del 2006.

No es como para estar tan creciditos, ¿no?
Pues a ver si cerramos todos la puta boca un poco, que hemos ganado un mundial, sí, pero tampoco hemos inventado nada.


PD: Y si alguien tiene alguna duda aún, recomiendo repasar el partido España - Italia de la Eurocopa de 2008, que España no sólo no pudo ganar (pasó en penaltis) sino que no jugó en absoluto mejor que aquella Italia con grandes ausencias.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

El reverso tenebroso de Los Mundos de Yupi


“Mi oficina parece Los Mundos de Yupi”, me dice un colega. Nada que objetar a la frase en cuestión. Sobre todo al verbo: PARECE.

Porque nada, nunca, es de verdad Los Mundos de Yupi. Nada. Y cuando las cosas parecen de color de rosa, suele ser porque hay una especie de miedo generalizado a hacer nada que oscurezca ese rosáceo ambiente. Suele ser porque se padece una especie de “dictablanda”.
Por eso, nadie puede enfadarse aunque haya motivos. Por eso está mal visto que se digan las verdades. Por eso es disonante expresar opiniones divergentes. Por eso se evita ir contra la manada, salirse del redil, quitarse las orejeras...

Y por eso mi colega me cuenta, por ejemplo, que puede llegar cualquiera y quitar el único puente del año a toda la empresa, ¡no comunicarlo siquiera! ¡¡¡Y QUE NADIE SE ATREVA NI A PREGUNTAR POR ÉL!!!

Así que, la próxima vez que quieras envidiar a alguien que trabaja en una empresa donde todo parece maravilloso, piénsatelo dos veces. Porque jugadas como esa puede haber muchísimas... y sin que se note.



PD: Y escribo esto asumiendo que hay crisis, que con tener trabajo ya es bastante, que tanto puente y el país como va y que blablabla... Me traen sin cuidado las circunstancias porque lo que cuento es atemporal.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Caricatura de un tipo...

Tal día como hoy pero de 2005, un tipo hizo una caricatura de otro tipo en un periódico, y se montó un pollo de mil pares en plan mal rollo, amenazas, censura y todas esas movidas.

Bueno pues como un hecho vale más que mil palabras, pues esto:

lunes, 26 de septiembre de 2011

Tiki-taka para paquetes


Lo que está pasando en el fútbol amateur español, y sobre todo en las pachangas entre amigos, es de risa. Y todo es culpa del Barça y de la Selección Española. Y del puñetero tiki-taka.

 


Antes de nada, pongámonos en situación: te llama un amigo y que si vas a jugar un partido, que han alquilado un campo (fútbol 11 ó 7, da igual), que son un equipo de la liga de empresas y una panda de amigos... Pos claro, allá vamos. Vale.
Llegas, y ves los típicos detalles contradictorios de esas “pachangas serias”: todos trajeados (hasta espinilleras), claros contra oscuros, sorteo para portero, distribución de puestos... lo normal. Todo en plan diversión pero gustándonos. Y a ganar. Porque sí, se quiere pasar bien, pero ganando. Porque nadie se divierte perdiendo, y el que diga lo contrario o es gilipollas o es madre.

Bueno, pues empieza el partido y se jode todo.
Se jode porque llegan uno o varios listos y dicen las palabras mágicas: “A circular el balón, a moverla hasta que haya hueco, saliendo con ella controlada, sin rifarla...”
Es decir: cualquiera de las recetas del tiki-taka, del Barça, de la Selección Española o del Brasil clásico de toda la vida (que ni que hubiéramos inventado nada en los últimos años).
Y todo el mundo asiente convencido. Como que es así como hay que ganar, derrochando clase, técnica, precisión, estilo, control... todo eso que hacen los mejores futbolistas profesionales del planeta después de años de entrenamiento.
Asiente el “bueno” del equipo convencido de sí mismo y de que su 50% (en el mejor de los casos) de pases al pie le permite algo así. Asienten los normalitos, pensando en sacar balones jugados pero sin acordarse de su 60% de balones perdidos. Y asienten los malos, pensando en marcajes de anticipación y en robar balones limpiamente a los delanteros, y no en aguantar y esperar el fallo.

Porque somos campeones del mundo, coño. Todos. Todos somos estrellitas y últimamente ese juego excelso está a nuestro alcance... Ya.
Por eso, cuando un equipo se pone a intentar jugar así (últimamente todos) y se encuentra delante otro equipo técnicamente mucho peor pero que juegan en zona y al contragolpe rápido o al patadón (cada día menos), se lleva una saca de goles. Se llevan la saca pero no entienden nada ni aprenden (“si hemos jugado bien” “si eran muy malos” “se llevaban todos los rechaces”...).

No aprenden que si no eres Messi, no puedes jugar como el Barça.
Ni que cuando eres un matado, tienes que jugar como Escocia (por ejemplo).
Ni que cuando eres tan matado, aún en tu mejor versión los paquetes de Escocia (por decir) te barrerían del campo.

¡Ni aprenden que hacer bien lo fácil es mejor que hacer mal lo difícil!

Por eso, si tú juegas pachangas voy a darte una receta para vapulear a todos los engreídos del “jogo bonito” que te vas a encontrar mientras sigamos siendo campeones del mundo:

1 - Esquema clásico de más defensas que delanteros o medios y subiendo por las bandas.

2 - Marcaje en zona y por detrás. Al fallo. Prohibido entrar al contrario: aguantando siempre, cubriendo sólo el tiro, que pase o centre porque en más del 70% de los casos acabará en pérdida de balón.

3 - Despejando en defensa sin contemplaciones. Siempre. Y, sólo si se puede, hacia el delantero. Nada de sacar el balón jugado.

4 - Delantero palomero (sobre todo, y si no jugáis con fuera de juego, es inexplicable que no lo aprovechéis) para pegar la defensa contraria al portero y despoblar el medio campo. Uno sólo y que no baje jamás, siempre con el último defensa.

5 - Y tirarlo todo: en cuanto se alcance la frontal del área hay que tirar sin intentar meterse hasta la cocina. Hay pocos porteros buenos y a poco que los tiros vayan a puerta...

Así de fácil, sin ahondar más (que podría) y sólo con esta receta de 5 puntos, una pachanga puede convertirse en algo bien jugado de verdad, y no ser uno más de esos correcalles plagados de gilipolladas y para tikitakeros de garrafón.

Que es que nos creemos todo lo que sale por la tele, coño...

miércoles, 29 de junio de 2011

La burbuja económica de la vida humana:

Henos aquí, poniendo al Ser Humano como sujeto en la teoría económica de la Utilidad Marginal:

El concepto de utilidad marginal explica el viejo enigma del agua y el oro. El valor de un bien se define a través de su utilidad en función de las circunstancias de escasez y necesidad, no a través del precio establecido. Por ejemplo: para alguien que se muere de sed, el valor del agua es mucho más alto que el del oro, pero a medida que va saciando su sed, el agua va valiendo menos y el oro más.

Bueno, pues curiosamente eso mismo NO pasa con los humanos históricamente y a nivel global:

En los albores del año 1.000 de nuestra era, en plena Edad Media, la población mundial rondaba los 300 millones de personas... ¡23 veces menos gente que ahora! 23 veces menos gilipollas, 23 veces menos egoístas, 23 veces menos horteras... Y se mataba con enorme prodigalidad, con regodeo incluso, sin freno ni mayor problema, en masa, a ojos cerrados, sin apelar a derechos inalienables del ser humano ni cosas parecidas...

En cambio, ahora ya casi somos 7.000 millones de personas, más que nunca en la historia de nuestra especie, y paradójicamente la protección y cuidado de la vida humana es más alta que nunca, ¡la de resortes sociales, políticos y legales que se ponen en movimiento ante la mera amenaza de matar a cualquiera! Por no hablar de la cantidad de recursos médicos, materiales, de seguridad... que se dedican en todo el mundo a salvar vidas.

Que yo no digo que lo de antes fuese mejor ni que lo de ahora esté peor; porque la barbaridad económica es la misma cuando matábamos sin ton ni son en la Edad Media siendo tan pocos, que hoy cuando nos la cogemos con papel de fumar siendo tantos...

O sea que desde tiempos inmemoriales, la teoría de la utilidad marginal la seguimos ¡exactamente al revés!

Y no es por nada, pero o esa teoría está equivocada (y no parece que así sea) o vamos de cabeza al colapso: La vida humana es la próxima burbuja económica que puede estallar.

Pero por una vez voy a ser constructivo y voy a proponer una solución: Paremos ahora que aún estamos a tiempo esta revalorización sin sentido del derecho a la vida, revirtamos el proceso instaurando la ley de la selva, aboliendo la medicina y el estado de derecho... dejemos que el instinto del hombre se explaya de manera natural, sin coartarlo ni reprimirlo artificialmente... y puede que así evitemos la quiebra del sistema.

Eso sí, hagámoslo poco a poco para evitar un estallido de la burbuja (aprendamos de la inmobiliaria): frenemos el crecimiento y luego promovamos el retroceso... podíamos empezar, no sé, quizá por la vuelta a la medicina tradicional y la prohibición de la investigación científica... por decir.

En fin, que volvamos a ser nosotros mismos.

miércoles, 1 de junio de 2011

¿Tu castillo es su nidito?


Hoy voy a hablar de vosotros, no de ellas. Sí, de vosotros, calzonazos, pobres diablos perdidos en una era tan feminista como antinatural.

“Hogar dulce hogar” dicen lánguidas paredes en coquetos pisitos hoy día...
“Mi casa es mi castillo” sonaban antaño de estancia en estancia ecos de voces tronantes...

Y su casa era su castillo porque cuando llegaban eran los amos. Los dueños. Los señores. Porque no tenían que ocuparse de hacer nada, porque su castillo era su dominio, porque las cosas estaban para servirlos a ellos, no ellos para servir a las cosas. Porque el puto amo no tiene necesidad de trabajar también en casa para mantenerse vivo, activo y libre, coño.
¿Os podéis imaginar a un Conde que vuelve de una jornada de caza al frente de sus perros, ponerse a ordenar el salón al llegar a la torre del homenaje? Yo tampoco. ¿Y que decida poner la mesa, preparar la cena, fregar platos, barrer el pasillo...? Ya, voy a parar porque a mí también me está dando asco.

No, no lo hacían, porque lo único que se tercia cuando tu casa es tu castillo, es llegar, tirar los zapatos, comer algo de pie, beber a morro y tirarse en un sillón a rascarse los huevos... Hacer lo que te dé la gana. Eso es lo que hay, y cualquier otra cosa es claudicar, humillarse, amariconarse... es volver a casa de mamá.

Me diréis que una casa hay que mantenerla para poder vivir en ella... ¡NO! ¡Eso es lo que ellas quieren hacernos creer! Tú no eres ellas, piltrafilla, ¡no tienes que aceptar su escala de valores! ¡NO TIENES NI QUE CONSIDERARLA! Tú eres un hombre, y un hombre prefiere un castillo propio aunque esté en ruinas, aunque le coma la mierda... antes que ese nidito limpito y pulcro que ellas llaman casa.

¡¿Es que tus genes no te gritan nada?! Tu casa tiene que ser enteramente tuya. Y conseguirlo es tan fácil como esto: no hagas NADA. Resiste. Nada. Sé tenaz y ganarás. Seguro. Sé un hombre.

Porque ahí fuera puede pasar lo que sea, pero mi casa es mi castillo.
Aquí la vida juega con mis reglas.
Aquí soy Dios.
Y punto.

martes, 31 de mayo de 2011

Ellas y los hobbies


En la línea habitual de generalización maniqueísta de este blog (interrumpida por la anterior entrada), hoy vamos a abrir un nuevo capítulo de la guerra de sexos.

No tienen. Los hobbies, las aficiones, digo. No las tienen. Su manera de pasar el tiempo es con gente. Hablando. Compartiendo. Relacionándose. Socializándose.
Pero podrá decirme alguien: “Hombre, muchas chicas cuando rellenan el típico cuestionario de aficiones o el típico apartado de “Intereses” del currículum, ponen música, cine, leer, viajar...”
Bueno, sí, pero mienten. Mienten como mujeres lo que no son capaces de hacer como hombres.

No les gusta el cine, porque si fuera así podrían ir solas al cine, o alquilarían un día 3 películas para pasarse la tarde en el sofá sin nadie. No. Lo que les gusta es “IR al cine”, que no el cine. O “QUEDAR para ver pelis”, que no simplemente verlas.

Tampoco les gusta la música. Mentira. Lo que hacen es oír música mientras hacen otras cosas. Si les gustase investigarían en su gusto musical, se descargarían cosas nuevas para escuchar, irían a bucear entre discos, se traerían 6 ó 7 para oírlos durante toda una tarde en casa. No. Lo que hacen es trabajar con música, planchar con música, correr con música...

De leer ni hablamos, ¿no? Salvo revistas femeninas (o sea de anuncios de cosmética) o en el transporte público o en algún momento perdido para rellenar... nada. Mentira.

Sobre viajar... ¿alguna vez han visto una mujer viajando sola? Sí, yo también, creo que una y todavía lo sigo contando por ahí.

Y así de desolador es el ser femenino, la vida de la mujer, la realidad de la mitad de la población mundial.

Los hombres son diferentes: mantienen ese primigenio instinto por descubrir nuevas cosas, por dominar aquello que les interesa, por profundizar en todo aquello que nos ofrece el mundo. Por eso nos gustan los documentales, por eso nos interesan las cosas, los objetos, los hechos... de ahí nuestra increíble ventaja genética para la creatividad, la técnica, la ciencia... y por eso la civilización humana es como es y ha llegado al nivel de progreso al que ha llegado. Gracias a nosotros y a nuestros hobbies. Porque sí, nosotros somos así.

Por eso, mujer, cuando creas ver a un hombre haciendo lo que tú crees una gilipollez, antes de abrir la boca pregúntate si simplemente no será una genialidad que no alcanzas a entender.

Y sí, claro que hay excepciones entre las mujeres pero, para el blog que nos ocupa, son totalmente irrelevantes.

miércoles, 18 de mayo de 2011

TODOS A UNA, POR FIN:

#nolesvotes #democraciarealya #spanishrevolution

Esto es serio. Es necesario focalizar todo este movimiento de hartazgo ciudadano. Y es urgente, porque todo el mundo empieza a intentar instrumentalizarlo. Así que hagámoslo:

La democracia española es como el barco de Chanquete: está varada. Y este movimiento quiere volver a echarlo al mar. Entre ellos hay gente de izquierda, de derecha, liberales, de centro... Gente que una vez que flote, querrán ir rumbo a uno o a otro lado. Pero para eso, antes, todos tenemos que hacer que flote.
Y eso es lo que todas las ramificaciones de este movimiento tienen que tener muy claro: que el Barco es el sistema democrático español, y los rumbos son las ideologías.
Es decir, que lo que sí tiene todo este movimiento en común es el primer y fundamental paso: la reparación del sistema. Es decir:


1 – Reforma de la Ley Electoral para que todos los votos de todos los ciudadanos de España, vivan donde vivan, cuenten igual en el reparto de escaños.

2 – Verdadera separación de poderes: Independencia total de la Justicia del poder político y reforma del Senado para que tenga un papel real y no siga siendo un mero trámite para el Congreso.

3 – Regeneración política: Listas abiertas, supresión de la financiación pública de los partidos políticos, inhabilitación perpetua para cargos públicos condenados por corrupción, supresión de los privilegios injustificados que conllevan los cargos políticos, publicación de sus patrimonios personales antes y durante el ejercicio de sus funciones, etc.


Y una vez conseguido esto, habrá elecciones. Y en esas elecciones ya propondrán los partidos políticos todas esas cosas que ahora mismo están embarullando, enturbiando y disgregando el mensaje principal de regeneración del sistema (que si nacionalización de la banca, que si derecho a la vivienda, que si reducir el funcionariado, que si retirar competencias a las CCAA, que si añadírselas, que si laicismo...). Porque a los verdaderos enemigos de este movimiento, lo que les interesa es que entremos a fondo en esas cosas posteriores, olvidándonos de lo primero que es lo que nos une, para que nos dividamos antes de conseguirlas. Hay que resistir la tentación de arrimar el ascua a nuestra sardina y evitar pedir o gritar cosas que no puedan gritar al unísono todos los indignados de izquierda y de derecha.
Porque esta es la primera vez en la democracia española en que no se enfrentan las dos Españas, la izquierda contra la derecha. Así que no dejemos que los de siempre (PP + PSOE) nos utilicen y lo conviertan en eso.

- Contándole a todo el mundo esos 3 puntos bien concretos y claros.
- Siguiendo las instrucciones de #nolesvotes: busca un partido entre los 3.000 que hay en España que tenga en su programa esos 3 puntos (o que esté lo más cercano posible) y votándole en las elecciones.
- Y volver a contarle a tus amigos, a tu familia, a tus compañeros y conocidos a quién votas y porqué 3 puntos lo haces.

Y de esto va todo, de ir todos a una como en Fuenteovejuna.
Nada más y nada menos.

martes, 17 de mayo de 2011

El modelo de HOMBRE:


Pues sí, en apenas 50 años, el modelo de hombre ha pasado de moverse en esta escala:

John Wayne ----------------------------------------------- Errol Flynn
O sea, de hombre rural, atávico y patriarcal, a hombre civilizado y playboy.

Para situarse en esta otra:

Russell Crow ------------------------------------------------------- Guti
O sea, desde el hombre de toda la vida, hasta lo más sospechoso. Sí, tan sospechoso como Guti, Mika, C. Ronaldo y tantos otros.

Sospechoso porque usan calcetines de colorines, porque se ponen gafas de colorines, porque usan bolso, porque llevan zapatillas de muchos colorines, porque se ponen chaquetitas de punto y ni son viejos ni están en párvulos, porque buscan peinados entre fotos de cantantes, actores... porque se depilan por nosecuántos sitios, porque se ponen cremitas, porque llevan dos docenas de pulseritas de colores, porque pasean Bull Dog franceses, porque “uf, yo no hablo de fútbol”, porque son artistas sin serlo, fotógrafos sin tener puta idea de fotografía, críticos musicales sin haber oído a Bruce Springsteen, críticos cinematográficos sin haber visto ni una peli anterior a 1980, todos unos literatos sin haber escrito más de un folio en su vida ni haber leído un libro anterior a 1950, porque se ponen bronceador, porque van de tiendas durante horas, y hablan de combinar colorines, y son sensibles, y lloran, y se ponen pendientes sin ser marinos (esto requiere otro post, prometido), y comen vegetariano, y son súper urbanitas, y eligen anillos, y van al gimnasio y hablan de “entrenar” como si hubieran hecho deporte alguna vez en su vida, y se compran una bici plegable de colorines sin haber montado en bici en su mierda de vida, y van super llenos de complementos tecnológicos sólo para decir sandeces en redes sociales, y llevan cascos de controlador aéreo de colorines por la calle... ¿de verdad es necesario que siga?

Porque sí: nos están jodiendo el modelo de comportamiento de la mitad de la humanidad a pasos agigantados. Están demoliendo las estructuras de la masculinidad. Van a acabar con nosotros para convertirnos en algo blandito, leve, sensible, lleno de remilgos y vacío de mollera que el feminismo y androfobia reinantes en nuestra mierda de sociedad pueda manejar y controlar a su gusto.

Se han convertido en algo que vomitaría el niño que fueron con 7 años, cuando aún tenían algún criterio, que haría morir de vergüenza a sus bisabuelas y que sus antepasados mandarían ejecutar sin pensarlo dos veces.

Ahora, la pregunta es muy sencilla: ¿en qué punto de la escala estás tú?
Y una pista: si algo de lo de arriba te toca aunque sea de refilón, es que estás muy, muy cerca del extremo derecho.


PD: Dar las gracias a mi amigo Raúl por haber abocetado esta teoría que nos acerca a todos un poco más a La Verdad, esa gran esquiva de la ciencia, la filosofía y las religiones.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Para gustos... ¿mujeres?


O sea que después de siglos de monopolio absoluto masculino en el diseño de banderas, de escudos heráldicos, de uniformes, de camisetas de fútbol... ¡se atreven las mujeres, esas advenedizas con cuatro Vogues leídos, a darnos lecciones de qué colores usar, en qué forma combinarlos y cuándo han de lucirse!

A buenas horas, guapas.

Vosotras, que temporada tras temporada estáis completamente perdidas, que consultáis aquí y allá para enteraros de qué poneros y cómo llevarlo, las mismas que dedicáis una gigantesca parte de vuestras vidas a informaros, a buscar, a decidir... ¡a seguir instrucciones de revistas, modistos y demás sacacuartos! Y todo para terminar dando el espectáculo que sufrimos todos por esas calles de Dios...

Sí, vosotras, esas pretendidas gurús del aspecto externo que juzgan en base a reglas cambiantes e irracionales y que se esfuerzan en imponernos sus visiones erráticas y contradictorias a nosotros, los sufridos hombres de bien.
A ver si os enteráis de que no sois más que unas recién llegadas, ¡de que nuestras banderas no pasan de moda jamás! ¡de que no hay que cambiarlas cada temporada! ¡y de que la relación del genotipo masculino con el mundo cromático es antigua, estable, segura, duradera... y acertada! Vosotras no sois más que niñas con zapatitos nuevos jugueteando a marcar tendencias.

Así que, por favor, cerrad vuestra linda boca, ocuparos de vosotras y dejadnos en paz.

Porque sí, chicas, también habéis llegado tarde al mundo del color.
Como a casi todo.

martes, 10 de mayo de 2011

Pero vamos a ver... ¿cuánto te crees tú que vales, piltrafilla?

Es muy gracioso esto de las redes sociales y la privacidad. Bueno, más bien la gente de las redes sociales preocupada por la privacidad.
No. No son famosos. Ni tienen información relevante para nadie. Ni ná de ná.
Tampoco las redes sociales piden datos bancarios, ni números de la Seguridad Social, ni DNIs... Ni nada de eso.
Pero están preocupadísimos. Pero... ¿por qué?
¿Para qué te crees que se pueden utilizar los datos de tus redes sociales? ¿para espiarte? ¿para chantajearte? ¿para manipularte...?

¡Pero a quién diablos le importas, atontao!

Mira: tus datos sirven sólo para vender audiencias. Para establecer tendencias de mercado. Para sacar conclusiones macrosociológicas (por cierto, bastante poco rigurosas) y para que en los anuncios que te aparecen en los márgenes, te salga un vibrador si eres fan de 5 páginas porno, o una armería si estás todo el día escribiendo que vas a ametrallar gente. Y fallan más que una escopeta de feria. Sólo eres una aguja en un pajar.

Esa es tu única importancia, ingrato paranoico: Ninguna. Todos tus datos no valen nada y si tuvieran que pagar por ellos, nadie en sus cabales daría más de un mísero euro.

Y sí: ingrato. Ingrato porque por si fuera poco, a cambio de tus estúpidos datos te ponen en contacto con tu gente, te dejan expresarte, te regalan páginas personales, te permiten lucir tus mierdas de fotos sin tener que invitar a ganchitos a los colegas y torturarlos con álbumes en casa... Estás más que bien pagado, so rata.


Epílogo. En cualquier y último caso, respóndete a esta pregunta: Si te pidiese como amigo Steve Jobs, o Mark Zuckerberg, o Barak Obama... o te pidiesen permiso para seguirte los fundadores de Google... ¿serías tan burro como para decirles que no?

Pues eso son las redes sociales, nené: tu única oportunidad de salir de ese limitado y oscuro agujero de paleto en el que vives.
A mí, que me espíen.

lunes, 9 de mayo de 2011

En inglés, anzuelo se dice Spotify


Así se pesca un pez, el animal más tonto de la tierra:

Coges un anzuelo, lo cubres bien de algo apetitoso y se lo echas cerca. El pez viene a comer, prueba, paladea, mordisquea, saborea... y cuando notas que está bien enganchado, pegas un buen tirón y pal cesto.


PD: ¿Que se escapa? No problemo. Recuerda que es tonto perdido y que además no tiene memoria: echas otra vez el anzuelo limitado a X horas de música gratis al mes, y a esperar.

lunes, 14 de febrero de 2011

Pan negro en los Goya 2011, cuando gana el descarte:

Una explicación plausible del bombazo de una película de segunda en los Goya de este año:

Los académicos, en una modélica operación castigo, deciden no votar la película de Álex de la Iglesia por su giro copernicano en la polémica sobre la Ley Sinde. Hasta aquí nadie sorprendido ¿no?

Pero en un finísimo alarde de pudor (impropio de ellos, aquí ha habido mano oficial), deciden no votar a la otra favorita tampoco -la película de Icíar Bollaín- porque el remedio sería peor que la enfermedad: ¿humillamos públicamente a la peli del presi prointernautas, y enaltecemos ante toda España a su más que probable sucesora proministerio? Demasiado descarado...

¿A quién votar entonces?

Pues claro, a la tercera en liza, a la película revelación, a la que no molesta a nadie y por eso fue nominada a destajo (porque somos así de independientes todos) con idea de darle un par de ellos de consolación y punto... Sí, al típico descarte de todos los años.

¿Que no la ha visto ni Dios a pesar de llevar tiempo suficiente estrenada? Bueno, pero... ¿desde cuándo ha importado eso?

Y al que no le guste, pan negro.