jueves, 24 de enero de 2008

Casillas, el mejor del... barrio, por ejemplo


¿El mejor del mundo? Sí, y qué más. A ver, dejando aparte lo difícil que es juzgar a un portero, sobre todo vista la inmensa disparidad de criterios que provocan (Zubizarreta, Buyo, Busquets...), me extraña sobremanera la increíble unanimidad que se aprecia entre todos los periodistas (vaya tribu, ¡qué cruz!), entrenadores, jugadores...
Por partes. El chaval va muy bien de reflejos, sí, bastante bien en tiros lejanos, decente en el 1 contra 1, bien en colocación... pero hablemos de sus incuestionables defectos: Mal en salidas por alto (la pifia sistemáticamente en 2 de cada 3, y en la tercera hace la estatua), y muy mal despejando esos balones (digo despejar porque no agarra uno) que suele dejar muertos en el pico del área chica o en la frontal del área grande, a disposición de los delanteros contrarios.
Son defectos demasiado grandes (abarcan más o menos la mitad de las intervenciones de un portero) como para que este tío sea el portero titular de la selección de un país plagado de buenos porteros. Capello ha sido el único que tuvo narices para cuestionarlo, pero acabó claudicando ante el entorno mediático madridista, el tonto de él.
Y ya que estamos, voy a ser bueno y voy a dar un truco infalible para saber si una parada es buena o no (incluso para los absolutamente ignorantes del tema, léase periodistas deportivos): ves la parada, lo flipas a gritos si te sale, y luego, más tranquilito, te preguntas: ¿si no lo hubiese parado, diría que ha sido una cantada? Bueno, pues en tres cuartos de las “San Casillas” que corren por ahí domingo tras domingo, la respuesta es sí. Si no las parase, no tendría nivel ni para segunda división. Así de simple.
Pero nadie se pregunta eso, el nivel de comedura de tarro al personal llega a extremos como los de aquel telediario en el que babosearon su nombre hasta la náusea mientras enseñaban “3 paradones impresionantes” que eran ¡la misma desde 3 ángulos distintos! Esto es el pan nuestro de cada día con este chaval, lo van a volver imbécil a base de decirle que caga y huele bien.
A pesar de todo es un serio candidato para que le caiga el balón de oro tarde o temprano: el chico es una mina de vil metal para Adidas.

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