jueves, 10 de abril de 2008

La República Socialista Española


Me adelanto al documental para fantasear yo también un poco antes de que la Mámen “que-asssco-me-da-todo” Mendizábal me estropee con utopías ridículas y efectistas, deducciones mucho más probables, razonables y más estimulantes.
En primer lugar, la II República sólo habría ganado la guerra gracias a la solución de emergencia del final: la ayuda indisimulada y la total tutela de Moscú. Total, que con una URSS victoriosa en la guerra de España, nos encontraríamos con el primer satélite de los soviets en Europa (represaliados, deportados y paseados por la República entre los de su propio bando durante el último año de la guerra, lo prueban). O sea que de la república democrática de la que hablarán en el documental, sospecho que na de na.
Llegando a la II Guerra Mundial en esta situación, aunque Hitler hubiese ocupado Francia no habría invadido nunca España (como dicen los chiquilicuatres de La Sexta) sin invadir a la vez la URSS, porque ¡serían aliadas! (¿dé dónde se saca esa causa-efecto el tal Jaume Grau?). Al terminar la guerra (doy por hecho la victoria de USA, aunque con menos capacidad para frenar la rapacidad de Stalin), es bastante probable que, con una España comunista, con todos los países ocupados por la URSS y con los partisanos italianos, el mapa de Europa de la guerra fría fuese mucho más rojo aún de lo que fue. También sería bastante probable que a lo largo de la guerra fría, cayesen más países dentro del telón de acero (Portugal derrocando a Salazar, Francia en un mayo del 68 mucho más potente y adelantado al 58...) por revoluciones internas favorecidas desde la vecindad de Italia y España.
En España habrían podido suceder dos cosas: o una sucesión de gobiernos soviéticos títeres de Mocú, o la aparición de algún gurú que invadiese de culto a la personalidad el sistema comunista español (tipo Castro, Tito... o quien la guerra y las purgas decidieran).
En esas condiciones no es nada probable que hubiese existido ningún “milagro español” gracias al turismo en los 60, ni ninguna transición a la democracia en los setenta... Las esperanzas democráticas estarían puestas en una hipotética caída del muro en el 89.
Aunque ahora que lo pienso, ante un bloque comunista de más países en Europa, más poderoso de lo que fue, y una OTAN más debilitada, no está claro que las muchas revoluciones comunistas que hubo mundo adelante no fuesen triunfando una tras otra, y que el muro, a día de hoy, aún no hubiese caído. Hasta podríamos estar hablando de un triunfo comunista a nivel mundial y unos Estados Unidos e Inglaterra aislados y soportando un boicot comunista internacional.
Quien sabe. Esta es mi deducción así por encima, pero esto es como el fútbol, supongo que habrá también 40 millones de deducciones distintas.
Lo que sí es triste es que con los medios que tienen en La Sexta para haber hecho un documental en condiciones (acercándose, por ejemplo, a las ucronías de la BBC que, dicen, les han servido de modelos), hayan hilvanado una colección de anécdotas (banderita, himno, Aznar, Zapatero, Eurovisión, Di Stéfano...) para entretenimiento de niñitos desinformados.
Pero así es el periodismo español: una fábrica de titulares vacíos que no resisten el más mínimo contraste.
Hitler sí puede aparecer en La Cibeles (como estuvo ante la Torre Eiffel... ¡qué agudos!), pero Stalin en la Puerta de Alcalá no ¿verdad?
Pues nada, a seguir aguantándolo.

3 comentarios:

Zomas Osborn dijo...

Esto se está demorando. En nombre de tus lectores pido un nuevo post... ya!!! ¿Qué tal "Olivenza: La Gaza del sur de Europa" o "Porque tú votas, existe la corrupción".

Gladius, ¡A la arena!

Gladius dijo...

Zomas, anoto y agradezco las sugerencias, supongo que todo llegará. Mientras espero que los temas no sugeridos le resulten entretenidos.
Y qué pasa, ¿no te pone Mamen "que-grima-me-da-todo" Mendizábal? Porque es raro que no hayas saltado en su defensa...

Zomas Osborn dijo...

Me pone, me pone!!!