viernes, 11 de julio de 2008

Sé lo que hicisteis... sobre deportes ¿para cuándo?


El programa de La Sexta “Sé lo que hicisteis” se basa en dejar en evidencia a todo un sector del periodismo audiovisual: el que se ocupa del corazón. Puede ser mejor o peor el programa y puede caer más o menos simpático, pero lo que es indudable es que a poco que se esfuercen, retratan perfectamente la casi total ausencia de profesionalidad de todos esos programas y periodistas. Y además deja al aire la incoherencia absoluta de todo el “sistema circulatorio” de los medios del corazón de este país (y me temo que de todos los países).
No es que en “Sé lo que hicisteis” hagan un programa a base del trabajo de otros, es que los otros dan ya hecho casi hasta el guión: su increíble falta de neuronas lo hace increíblemente sencillo (los que peor lo pasan seguro que son los de documentación, con toda la basura que tienen que tragarse a diario).
Bueno, el caso es que no acabo de entender como esta idea no se exporta al periodismo deportivo, porque sería un no parar. El actual panorama de los medios de deportes en este país es lo más parecido a la prensa rosa que podemos encontrar en el mundo: noticias sobre rumores, desmentidos continuos, partidismos y odios increíblemente subjetivos, ausencia total de contraste en las informaciones, connivencia general con los sujetos de la noticia (jugadores, entrenadores, directivos...), falta absoluta de rigor en las argumentaciones, cero periodismo de investigación, exaltación constante de las pasiones, protagonismo personal de los propios periodistas...
Todo esto me viene a la mente ante las últimas declaraciones del presidente de la UEFFA en las que afirma que si el Manchester United quiere que Cristiano Ronaldo cumpla el contrato que él mismo ha firmado libremente, eso es esclavitud moderna. ¡Eso lo ha dicho el presidente de las federaciones de fútbol europeas! Sin despeinarse, el tío. Luego se atreverá a pronunciar la palabra “profesionalidad” algún día ¿no?
Pero como son declaraciones que favorecen al R. Madrid, aquí nadie lo ha puesto a caer de un burro. Eso es la prensa deportiva de este país: Un sistema tan vergonzoso y fácil de tumbar, destruir y dejar en evidencia como la prensa del corazón.
Por favor, urgentemente: quiero un Sé lo que hicisteis... pero sobre deportes. Y ya puestos, también con presentadoras guapas por supuesto.

lunes, 7 de julio de 2008

The Old England Potatoes Club


Hay que expulsar Wimbledon del circuito de Gand Slams de la ATP. No soy nadie para decirlo, y la ATP hará lo que le dé la real gana, pero deberían hacerlo.
El partido de ayer contrarrestó con la épica del número 1 y 2 del mundo, la vergüenza de un torneo totalmente desfasado en sus normas y en sus maneras.
Es increíble que haya sobrevivido hasta hoy a base de aplazar partidos por culpa de la lluvia sin hacer nada por evitarlo (ni cambiarlo de fechas, ni cubrir las pistas...). Alucinante que haya tenido que decidirse el torneo en la penumbra de un atardecer, ya casi anochecer, por culpa de que la luz artificial está prohibida. Paso por la manía de hacer vestir a los jugadores de blanco inmaculado, o por la mierda de aforo que tiene la pista central, o por la enorme contradicción entre normas obsoletas y que un ordenador acabe decidiendo si la bola entró o no...
Pero lo más increíble es el patatal infame en el que se tuvo que jugar la final: Un campo de hierba que es más tierra que otra cosa, bacheado y con la pelota botando irregularmente. El torneo se empieza jugando en hierba, y a medida que pasan los partidos, los campos se van pelando y se llega a la final con el campo en el peor estado posible. Esto se podría subsanar reservando la pista central sólo para la final, pero no son capaces. O cambiando el césped de la pista central para la final (en el chabacano fútbol se hace), pero tampoco lo ven posible. O teniendo varios campos de césped preparados para meter en la pista cuando toque (también lo hacen varios estadios de fútbol), pero debe ser pedir demasiada tecnología.
El resumen es que la solución sólo pasa por poner pasta para conseguir que el torneo tenga el nivel que su repercusión mediática exige. Pero no, no son capaces, son ingleses y ellos saben muy bien como hacer las cosas.
Ayer Nadal ganó una auténtica basura de torneo provinciano que se juega mitad en hierba, mitad en tierra. Menos mal que venía entrenado del amago que jugó contra Federer (y que también ganó) hace unos meses. Para mí, Nadal sigue siendo mejor sobre la tierra (que es sobre lo que jugó ayer) hasta que no le gane sobre la hierba de verdad.
Y hace tiempo que Inglaterra no debería tener un Grand Slam.

viernes, 4 de julio de 2008

De colores y marcas...


Partido Rusia - España en la Eurocopa. El color del traje de la selección rusa es el blanco. El color de la española es el rojo y el azul marino. Imposible confundir ambos equipos ¿no?
Pero saltan los equipos al campo y lo hacen con ¡las segundas equipaciones! De un rojo anaranjado Rusia, y de un dorado desleído (¿por qué hemos abandonado el gualda? por Dios...) y azul marino España.
Que nadie me diga que esto no huele de lejísimos a apaño de las marcas (¿Nike por Rusia y Adidas por España de acuerdo en algo? parece que en la pasta sí) para que las segundas equipaciones luzcan más de lo que su razón de ser exige y el fútbol necesita. Esto redunda en ventas, claro.
Lo que no entiendo es como un seleccionador (por ejemplo) no se niega por completo a estos tejemanejes. Por orgullo, entereza y dignidad. Nada más y nada menos.
El fútbol no es que esté mercantilizado; es que directamente es un mercachifleo absolutamente desvergonzado.
Y pensar que me sigue gustando...

martes, 1 de julio de 2008

De oportunidades despreciadas...


He oído estos días de mi amigo Manu (todo un gurú en esto del fútbol, el tío) que el señor Bojan es, probablemente, el mayor cateto que ha dado el planeta futbolístico en muchísimo tiempo.
El nené estaba cansadito tras una liga y con menos de 20 años (que tomen nota de su capacidad física los equipos que puedan estar interesados en él), o psicológicamente poco preparado (que sigan tomando nota) para una competición como la Eurocopa.
Me lo tengo que creer. No puedo pensar que es una excusa para no jugar con la Selección Española (sería una incoherencia increíble porque ha jugado con las categorías inferiores) esperando una convocatoria de Serbia, a pesar de su más que sospechosa espantada en su anterior convocatoria.
Bueno, el caso es que tras la victoria de España en la Eurocopa, hay quien piensa que el chaval podría presentar su candidatura a tío más tonto del país.
Yo sólo pienso que si fuese su Nuria Ber (su representante, vaya), lo cuelgo del pino más alto que encuentre en La Massía.
Y si fuese cualquier futuro seleccionador, dado el resultado que han dado todos los que han jugado en su puesto en este campeonato, no me arriesgaría a un nuevo plantón convocándolo de nuevo.
Pero como soy un simple aficionado, sólo pido no tener que verle nunca más vistiendo la camiseta de mi selección.
Todo esto independientemente de la compasión que empiezo a sentir por el chaval.